En nuestro programa de hoy recordaremos cuándo todos éramos ricos con Aznar y los obreros ganaban 3500 euros, todo era una ficción decían los socialistas...¡Y es la verdad! ¡Ha sido cómo un sueño!
Me interesa cómo filósofo cómo se llegó a dar la vuelta la vanidad. Me explico:
Todo el mundo quería tener el coche más grande y potente porque había dinero, primero fueron los Renault Laguna en negro o gris metalizado, los Audis, los BMW, pero no era suficiente...así que pasamos a los enormes 4X4 de Nisan--yo lo recuerdo--y luego a los jeeps de combate del ejército de Estados Unidos en Afganistán, en versión popular...¡Parecíamos todos que íbamos en coches negros y blindados cómo señores importantes, cómo agentes de la CIA!
Pero aquí es dónde quiero que reflexionemos:
Hubo un momento en el que cómo todo el mundo tenía dinero y ya nadie podría distinguirse sobre nadie, fue "de catetos" tener un BMW, era cómo tener un Mercedes en los 80...y SE PUSIERON DE MODA LOS BUGUIES PARA DISTINGUIRSE y así los ejecutivos de las cLAses altas, para demostrar que se sentían seguros sin la coraza armatóstica de un gran vehículo que escondiera sus complejos, empezaron a consumir BOOGUIES.
LOS BOOGUIES, CONDUCIRLOS SIGNIFICABA ME SIENTO SEGURO |
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