FUSTES DE UN VÍDRIO FRÁGIL
La alcancia vacía,
el sueño que pasa y queda,
la mañana del estigma pasado y la flor,
el abandono del cuerpo y lo que de él
pero sin nada ser y temido tiempo,
permanecer respuesta,
ser destino,
otorgado el conocimiento,
persuadido refulge.
Las sombras del cántaro se rompen
y brotan bocas del canto superficie
sellando el alma alrededor
no puedo volver en un momento
todo es así por desgracia.
PASADENAS
Le daba sombra la papelera
y eso le hacía sentirse real.
Tratar de ser el amarre del mientras
Y todo sujeto a sentir y esperar
Miércoles vacío hace un nido
Y el tubular destruido en calma
Porque todo produce
Su obstinación
Más allá de las aritméticas su canto
y más lejos de todo su persistencia aún
y por fin entregar y saber y tomar acaso
pero no por favores debidos ni por espantos soterrados,
más allá de lo lejos queda lo que se ve
y está difuso y también labra
y es una voz acompasada de muchas voces
que callan o que no dicen nada
y una bola de luz venga a la Tierra
antes de la extinción
ESTANCIA EN LUZ
En el límite de la desgracia habitaba
ese era su sino y sin embargo lo dicho tiene todo
el tono del oscurecer
y la persuadida dicha que dimana y recorre
pero sin frescas canchas donde los hombres botan
ni las alimañas de los días feroces que son
para el pastor y las rodillas despuntadas
así en lo extraño del desfile
se esparció una peste y una duda remansada
así hasta la cacería del ruido y del no dar
perdido y ser, ser perdida y sometimiento
para los que son todos y ya no caben en si
y para los que nada temen y avanzan
para al final ser mole o curva
para al final ser diatriba y aguas
sin retorno a la sonata de la vida aprendida
y sin fábula cantada ni amaños del coro
para no ser
para no decir
y para no hablar.
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